Malala Yousafzai es la nueva #Histórica que destacamos hoy en Fundación Antonia. Con tan sólo 24 años, esta joven activista paquistaní ocupa un lugar importante en la historia mundial, convirtiéndose en una figura reconocida por su lucha en pro de los derechos de la educación de las niñas, frente a las restricciones de los talibanes.
Además, se convirtió en la ganadora más joven del Premio Nobel de la Paz en el año 2014, con tan sólo 17 años.
¡Toda nuestra admiración para ella!
Libros
Autora de los libros Yo soy Malala (2017) y Malala. Mi historia (2019).
Cuando el mundo está en silencio, una sola voz se vuelve poderosa
Malala nació el 12 de julio de 1997 en Mingora, Pakistán. Como hija de un matrimonio musulmán sunita que dirigía una cadena de escuelas en la región, creció consciente de que la educación es un aspecto fundamental para el desarrollo humano, y de la misma forma, un derecho más allá de un género.
Para entender su trascendencia en la historia, debemos remontarnos al 2012. Malala comenzó a escribir un blog bajo el pseudónimo de Gul Makai para la BBC.
En este, denunció la brutalidad, el terror y la limitación de libertades en el acceso a la educación de niñas, que sostuvo el régimen talibán que regía en el territorio Pakistán, donde la joven y su familia vivían.
“Debemos creer en el poder y la fuerza de nuestras palabras. Nuestras palabras pueden cambiar el mundo”, Malala Yousafzai
La destacable valentía de Malala la transformó rápidamente en una voz reconocida dentro y fuera de su país. Sin embargo, la posicionó como un blanco frente a quienes querían callar su voz.
Así, el nueve de octubre de 2012, mientras la estudiante de 15 años viajaba en el bus escolar hacia casa, fue víctima de un atentado por parte de un talibán que la llamó por su nombre antes de intentar asesinarla. Malala recibió dos disparos en la cabeza.
La joven activista fue trasladada por aire a un hospital militar en Peshawar. Fue sometida a una operación de cinco horas para extraer la bala. Esta recorrió el costado de su ojo izquierdo, cuello y se alojó en su hombro, cerca de su médula espinal.
Un nuevo comienzo
Cuando salió del coma inducido, el mundo se hacía cargo de su caso y ella recibía diferentes reconocimientos por parte de líderes mundiales.
Sabías que…
Tras un discurso que Malala realizó el día de su cumpleaños en las Naciones Unidas, el Secretario General Ban Ki-moon declaró ese día como el Día de Malala en honor a su coraje y activismo.
Tras el atentado, la familia Yousafzai se trasladó a Reino Unido. Allí la activista logró continuar con su escolaridad, para más tarde finalizar sus estudios de Política, Filosofía y Economía en la Universidad de Oxford, Inglaterra, en 2020.
Actualmente, Malala es Mensajera de la Paz de la ONU. Creó una fundación con su nombre destinada a apoyar la igualdad en el acceso a la educación de niñas y adolescentes.
Respecto a la reciente toma de poder por parte del grupo Talibán en Afganistán, Malala se ha pronunciado de forma constante, llamando a diferentes líderes mundiales a tomar posturas valientes para proteger los Derechos Humanos.
Además, pidió a los países abrir sus fronteras a los refugiados afganos, a la gente desplazada, con el fin de garantizar que los niños y niñas tengan acceso a la educación.